Antes de andar montado analice sus posibilidades económicas para no terminar pagando demás por un vehículo

En un día lluvioso moverte de un lado a otro puede significar un gran desafío. Utilizar el transporte público puede facilitarte la vida. No obstante, tener un vehículo ayuda a agilizar tareas sin las demoras excesivas e incomodidades para llegar a tu destino. Si estás considerando comprar o alquilar un carro, es importante analizar cuidadosamente tus necesidades y recursos financieros para tomar la decisión adecuada.

Sin embargo, tener un automóvil, sea propio o alquilado, implica una inversión considerable, dependiendo de las necesidades particulares de cada persona. Se trata de una decisión que se debe analizar detenidamente (con la cabeza fría) para no afectar tus finanzas personales o familiares.

Entonces, ¿qué conviene más a tu bolsillo: comprar o alquilar un carro?

La lógica al comparar entre uno y otro te lleva a pensar en “un carro propio” y si es nuevo mejor. Ese pensamiento no es incorrecto, lo malo es cuando ese deseo lo hace elegir decisiones emocionales y no financieras. 

Lo anterior guía a la respuesta adecuada: “depende”, ya que la misma varía según los requerimientos personales y la situación económica individual. Pues cada escenario tiene sus pros y sus contras y lo que le funcione a uno, no necesariamente le sea factible a otro. 

Por tanto, lo ideal antes de adquirir un vehículo es ponderar los costos que esto implica. Todo esto, sin importar si es comprado (nuevo o usado) o alquilado.

¿En qué más debo de pensar?

Otros aspectos a considerar son las características del automóvil y las condiciones en las usarás el vehículo. Por ejemplo, debemos de considerar si lo utilizaremos para trasladarte al trabajo, usarlo en las vacaciones de verano, hacer mudanza o envíos, entre otros. Es decir, tener claro estos aspectos te ayudará a elegir lo más conveniente y realista a tu bolsillo. 

Recuerde comparar costos a largo plazo entre rentar un vehículo o comprarlo. Así como también sopesar su capacidad de pago y el estado de su historial crediticio. De todo ello dependerá si le pueden financiar una parte del costo total o no.

Aspectos a analizar en el alquiler

Una gran parte de los dominicanos que opta por alquilar un vehículo (a largo plazo) lo hace por tres razones: vienen del extranjero a hacer turismo interno, quieren tener acceso a modelos más avanzados que no pueden pagar o para buscar algún tipo de beneficio económico, como hacer taxi.

¿Qué ventajas y desventajas tiene?

Lo bueno de pensar en rentar un automóvil es que los costos mensuales suelen ser menores que un financiamiento estándar. No eres responsable de las reparaciones generales del vehículo, no tienes que pagar seguro, y lo mejor, no tienes la presión de tener que venderlo a un precio inferior al de compra por devaluación. 

No obstante, la parte no “amigable” para muchos es que con un auto alquilado se torna difícil prescindir del contrato antes del tiempo acordado, a veces suele tener limitaciones en las millas mensuales o anuales que debes recorrer. En fin, estarás pagando por un servicio, no por la tenencia permanente del vehículo.

En el caso inverso, de que entienda que es mejor tener un vehículo propio, comprarlo para solo usarlo por dos meses no sería tan factible, debido a que los restantes 10 meses estaría en desuso sin ningún beneficio. A menos que decida rentar más adelante y, a veces, “sale más cara la sal que el chivo”, porque se destruyen al no tener una supervisión constante de parte del propietario. 

Otro escenario hipotético, es que una persona requiera de un vehículo rentado para fines de servicio de pasajeros. En este caso lo usaría para hacer taxi (Uber) e ir ahorrando para el inicial de un vehículo dentro de 12 meses o más y la otra parte financiar al banco (si aplica).

Carro propio

Dicen que nada como lo propio y es cierto. Te da la libertad no solo de ser el propietario, sino  de tomar decisiones libremente sobre el carro. Esto sin hablar de la comodidad, independencia y beneficios durante una emergencia familiar. 

Sin embargo, al momento de comprar un auto, sea 0 kilómetro o no, debe contemplar que el gasto será superior, pues incluye, seguro, financiamiento, mantenimiento, depreciación, consumo, entre otros.  Pero el hecho de que el vehículo sea propio (usado o no) una vez lo pagas completamente pasa a ser un valor poseído. 

En el futuro se convierte en una oportunidad de inversión, en donde puedes, dentro de unos años, venderlo y comprar un modelo más avanzado o invertir el dinero en bienes raíces. Este último, usado como plan de jubilación.

¿Qué debo de considerar si quiero comprar un carro?

En caso de que optes por comprar un carro financiado, asegúrate de que el plazo no sea muy largo (menor de tres años) y que la tasa sea fija, pues mientras más largo sea el plazo, menos carga mensual tendrás, pero deberás pagar mayores intereses. De tomar el plazo a cinco años, generalmente, puedes que termines pagando hasta un 60% más del valor del automóvil. 

Mientras que si ahorras el equivalente a las cuotas de dos años por un vehículo financiado, puedes considerar un auto usado de la misma características y quedar sin deudas. Pero si continúas con la idea de que sea nuevo, se exhorta ahorrar un buen inicial  y elegir mejores condiciones de financiamiento. 

Por ejemplo, si se te presenta una situación económica urgente, tienes la alternativa de venderlo o arrendarlo para obtener liquidez o ingresos extra.

¿Entonces debo comprar o alquilar un carro?

En sentido general, no siempre es mejor alquilar o comprar. Lo ideal para ti es que sea una decisión basada en tus necesidades y tu capacidad de endeudamiento